13/5/09

SIRENA EN EL DESIERTO


Ella sintió su corazón encharcado,
por tantas lágrimas vertidas.

Siguió la estela de una estrella
que en el camino se disipó.

Girando en torno a la luz,
como una polilla enjaulada.

Volvió al desierto de sus sueños
para bañarse en el oasis del destierro.

Llenando los vacíos con piedras,
vaciando los suspiros con arena.

Gritando su nombre alimenta al viento,
que le da un respiro cada noche.

El tiempo se agota en su manto de arena,
los signos escarchan su desierto.

En el ojo de la tormenta se perdió,
hundida en su propia tempestad.

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